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jueves, 29 de octubre de 2015

Deberías buscarte un edulcorante natural y saludable...

El azúcar elimina del cuerpo humano minerales esenciales y vitaminas, envejece y debilita el organismo, incrementa la presión arterial, eleva los niveles de triglicéridos y de colesterol LDL y aumenta el riesgo de enfermedades del corazón. También produce caries y enfermedades periodentales, que pueden resultar en la pérdida de piezas dentales e infecciones sistémicas.
Por otra parte afecta al sistema autoinmune generando trastornos como la artritis, alergias y asma. Desequilibra el sistema hormonal y puede fomentar el desarrollo de células cancerosas. Por todas estas razones, deberías buscarte un edulcorante natural y saludable.


Entonces, ¿qué debemos hacer? ¿Nuestra necesidad de consumir dulce no nos dejará escapar de las garras del azúcar o existe alguna solución al problema?



La solución es el azúcar de abedul
Durante la Segunda Guerra Mundial, Finlandia sufría una escasez aguda de azúcar y el país no tenía recursos propios para la producción del mismo, por lo que los finlandeses buscaron una solución. En ese momento, los científicos descubrieron un pentapentol bajo en calorías, obtenido de la corteza de abedul.

Hermann Emil Fischer
En química orgánica se conocía el pentapentol (xilitol), que es el activo del azúcar de abedul, desde hacía mucho tiempo; concretamente desde que fue descubierto en 1891 por el premio Nobel de Química, Hermann Emil Fischer. Entonces, se estableció que el propio cuerpo producía a diario una pequeña cantidad de pentapentol para su metabolismo.

Es decir, nuestro propio cuerpo nos indica que un edulzante a base de pentapentol es un azúcar con beneficios para el organismo, que de hecho, puede y sabe metabolizarlo por si mismo.

Lo mejor del azúcar de abedul es que sabe igual que el azúcar normal y tiene su mismo aspecto, aunque aquí acaban las similitudes.
Mientras que el azúcar inflige daño a nuestro cuerpo, el azúcar de abedul puede sanarlo y repararlo. Fortalece el sistema inmunitario, protege contra las enfermedades degenerativas e inhibe el proceso de envejecimiento.

Recolección de corteza de abedul
El azúcar de abedul tiene cinco carbonos, lo que significa que tiene un efecto antimicrobiano al inhibir el crecimiento de bacterias. Mientras que el azúcar común es muy acidificante, el de abedul aumenta el valor básico ayudándonos a man
tener una dieta alcalina durante todo el día con todos sus beneficios.
Todas las otras formas de endulzar son azúcares de seis carbonos que alimentan las bacterias y hongos, como la cándida.

El azúcar de abedul tiene un 40% menos de calorías y un 75% menos de hidratos de carbono que el azúcar corriente. Además, es absorbido y metabolizado lentamente por el cuerpo sin incrementar los niveles de insulina, por lo que el cuerpo no acumula grasa para estabilizar los niveles de glucosa. Así no engorda.


Las caries y las afecciones de las encías son problemas graves de salud
La medicina señala que la dieta es de gran importancia para la salud oral. Las personas que comen demasiado azúcar debilitan sus sistema inmunológico y producen un efecto nocivo para su salud bucal. En la boca viven más de 400 cepas de bacterías, la mayoría de las cuales son benignas. Pero cuando el azúcar entra en juego, las cepas nocivas se alimentan de él y pueden proliferar.

La placa no tratada en las encías se endurece y forma sarro, que deriva en enfermedades de las encías, que se presentan en dos formas: simple inflamación de las encías (gingivitis) o como una enfermedad de las encías (periodontitis), que puede conducir a la pérdida de dientes y encías retraídas.


El azúcar de abedul es el sueño de toda personas preocupada por su salud dental. Hace que los efectos dañinos de consumir azúcar corriente se conviertan en beneficiosos. 
El azúcar de abedul no fermenta, por lo que no puede ser digerido por las bacterias de la boca y no se convierte en ácido. De esta manera ayuda a mantener un correcto equilibrio alcalino en la boca. 
Este ambiente alcalino no es atractivo para todas las bacterias dañinas, especialmente la Streptococcus mutans, responsable de la caries. Además, evita la formación de placa.


Cuidar tus dientes mientras duermes

Quién utiliza este azúcar antes de acostarse y después de cepillarse los dientes protege y cura los dientes y las encías. A diferencia del azúcar, el azúcar de abedul puede permanecer durante la noche en los dientes. Con un uso adecuado y constante, desplaza las cepas más perjudiciales de bacterias bucales y por lo tanto cambia el cultivo bacteriano a largo plazo.
El azúcar de abedul acelera incluso la remineralización del esmalte, ayudando a rellenar pequeños huecos del esmalte y reforzando los más grandes, para hacer los dientes menos sensibles.

El consumo regular de este tipo de azúcar mejora la función protectora de la saliva, estimulando su flujo y ayudando a mantener en los dientes los minerales útiles. El aumento de la producción de saliva es especialmente importante para las personas que sufren sequedad en la boca debido a enfermedades, la edad o efectos secundarios de los medicamentos.

Dado que el ecosistema de la boca pierde su acidez con un consumo constante del azúcar de abedul, es aconsejable tomar después de cada comida una cucharadita en el café, te o cualquier otra bebida, o bien tomar una media cucharadita disuelta en agua para enjuagar la boca. Los estudios han demostrado que el azúcar de abedul tiene un efecto a largo plazo y, posiblemente, incluso un efecto permanente.

El azúcar de abedul ha sido elogiado en la Revista de la Asociación Dental Americana recientemente: "El azúcar de abedul protege satisfactoriamente contra la caries dental [...] se ha demostrado que consumir regularmente azúcar de abedul ha reducido la caries en adolescentes finlandeses entre un 30 y  un 60 por ciento. Los estudios realizados en Canadá, Tailandia, Polinesia y Belice muestran estudios similares".

Un estudio realizado por la Escuela de Medicina Dental de Harvard concluyó: "El azúcar de abedul reduce significativamente la incidencia de la caries dental".


El azúcar de abedul y las infecciones de oído, nariz y garganta

La otitis recurrente supone un gran peligro para la salud física de los niños. A menudo, se insertan tubos con un líquido en el oído medio del niño, con el fin de eliminar la infección. Este método no sólo ayuda a combatir las infecciones, sino que también aumenta la audición.
El habla, que es una parte importante del proceso de aprendizaje del niño se desarrolla en los primeros dos años de vida. Si la audición del niño se dificulta por infección o líquido en el oído medio, esto puede complicar el aprendizaje del habla.

Se demostró que la infecciones repetidas del oído medio, incluso si son tratadas en los dos primeros años de vida, pueden conducir a un mayor deterioro de la capacidad lectora hasta la edad de nueve años. En otro estudio, en el que se observó a los mismo niños durante un período de tiempo más largo (hasta los 18 años) se observaron problemas en ele aprendizaje y el comportamiento social.

Una de las muchas propiedades beneficiosas del azúcar de abedul es inhibir el crecimiento de bacterias que causan infecciones del oído medio en niños pequeños.

Estudios a 1.000 niños demostraron que consumir azúcar de abedul reduce la incidencia de infecciones del oído medio un 40%, así como la incomodidad persistente y la necesidad de tomar antibióticos.


El azúcar de abedul y la osteoporosis

Con respecto a la ruptura de huesos, consumir azúcar de abedul muestra ventajas especiales. Estudios finlandeses demostraron que la densidad ósea se mantenía en ratas sin ovarios a las que se había administrado azúcar de abedul. En las ratas que no lo recibieron se observaron niveles de estrógeno y de densidad ósea significativamente disminuidos.

En otro estudio se observó que la pérdida de masa ósea relacionada con la edad en ratas macho de edad avanzada se retardaba tras la administración de azúcar de abedul en un 10%

En una acción sin precedentes, los científicos finlandeses presentaron una tesis en la que administraron a seres humanos una dosis efectiva de unos 50 gramos de azúcar de abedul al día. Incluirlo en la dieta diaria significa, no sólo fortalecer la densidad ósea, sino también hacer algo bueno para todo el organismo.


El azúcar de abedul y la resistencia a la insulina, la hipertensión, la diabetes y el desequilibrio hormonal

Se ha demostrado en varios estudios clínicos que el azúcar de abedul se degrada muy lentamente. De hecho, su índice glucémico (que mide cómo se obtienen los nutrientes en el torrente sanguíneo) es de 7 mientras que el del azúcar corriente es de 68-99.
El azúcar de abedul es un estabilizador natural de la insulina y, por lo tanto, no produce incrementos ni caídas repentinas del azúcar.

Los alimentos edulcorados con este tipo de azúcar no aumentan los niveles de insulina, por lo que es el edulcorante ideal para diabéticos y personas que quieren perder peso.
Cada vez más, los investigadores están de acuerdo en que un nivel bajo de insulina también es importante para un programa exitoso contra el envejecimiento.

Si se utiliza azúcar de abedul en lugar de azúcar convencional se reduce el consumo de alimentos de alto índice glucémico y carbohidratos refinados, lo que no sólo reduce el riesgo de síndrome de ovario poliquístico sino también los quistes ováricos, fibromas, endometriosis, síndrome premenstrual, sofocos y aumento de peso.


Ahora ya tenemos una alternativa, algo que satisface nuestro antojo de dulce y al mismo tiempo sigue siendo saludable.

Información cedida por la revista Vida Natural


La información contenida en este artículo tiene una función meramente informativa. En todos los casos es preferible consultar con su terapeuta, médico, u otro profesional de la salud.

jueves, 22 de octubre de 2015

Cabello. Cómo evitar la caída otoñal.


La naturaleza es rítmica. Climatológicamente lo podemos ver en las estaciones del año. Podríamos decir que hay dos grandes fases biológicas al año. 


Durante la primavera-verano se da una época que favorece el crecimiento y la fertilidad. El otoño-invierno es favorable a procesos de enlentecimiento, e incluso estancamiento, biológicos.

Es precisamente en otoño-invierno cuando esta involución biológica se ve en todos los parques y jardines de nuestros pueblos y ciudades, así como en nuestros montes. Los árboles de hoja caduca, pierden sus hojas debido a la disminución de las horas de sol y luz y la disminución de temperaturas. 


Algo muy parecido es lo que ocurre con nuestro cabello: todo el mundo es consciente de que, estacionalmente el otoño es una época en la que la pérdida de unidades capilares aumenta.

Siempre que se enfoca el tema del origen o la causa dentro de cualquier problema de salud, se tiende a buscar o a identificar una única causa. ¡Nada más lejos de la realidad! Hoy en día cualquier terapeuta tiene más que asumido que el origen de la mayoría de los problemas que aquejan a la población es multifactorial (múltiples factores que confluyen y favorecen la aparición y la evolución del problema en cuestión).

Esto aplicado al tema del cabello indica que las causas a barajar ante una caída de cabello pueden (y suelen) ser variadas. Por un lado tenemos la causa más frecuente que es el aumento de hormonas sexuales masculinas o el aumento de la sensibilidad del folículo piloso a las mismas ("alopecia androgénica"). Por otro lado, y que cada vez vemos con mayor frecuencia, está la caída del cabello secundaria a algún proceso de estrés.
También hay que plantearse que una pérdida de la masa capilar puede ser secundaria a algún déficit de nutrientes esenciales (hierro, vitaminas...). Por otro lado tenemos la constante agresión físico-química a la que está sometido diariamente nuestro tejido capilar (champús químicos, secadores, gominas...). A todo esto hay que sumarle el factor estacional comentado anteriormente.

Pues bien, imaginemos un señor o una señora con condicionante genético marcado hacia unos niveles de hormonas masculinas altos, que soporta un alto nivel de estrés, que no se alimenta correctamente, que usa diariamente champús químicos y gomina o laca, y que además estamos en otoño.
Esta imagen no es tan anormal en nuestros días.

Indudablemente dentro de todos estos factores, hay unos modificables y otros no. Por ejemplo, no podemos modificar nuestra tendencia genética ni la estación del año.
Pero hay una serie de condicionantes sobre los que si puedo actuar. Con respecto al manejo del estrés, yo puedo trabajar con distintas técnicas (psicoterapia, yoga, relajación, meditación...) para que el impacto de la agresión psicoemocional de nuestra "vida moderna" sea lo mínimo posible. También podemos mejorar la calidad de nuestra alimentación por una doble vía: llevando una dieta adecuada y equilibrada que incluya frutas, verduras, frutos secos, semillas, productos germinados... y si todo esto es de origen ecológico, mucho mejor; y suplementándonos con la gran variedad y calidad de productos que nos ofrece el sector de la herbodietética en nuestro país.

Actuar sobre todos estos condicionantes sería una medida realmente deseable, pero puede suponer cambios tan importante en nuestros hábitos de vida de las personas que les resulte imposible mantenerlos a largo plazo. Sin embargo hay aspectos aparentemente insignificantes y muy fáciles de incorporar en nuestro día a día que harían un favor enorme a nuestro cabello. El más sencillo y significativo es cuidar los productos de aseo personal que ponemos en contacto con el mismo.

Hay que hacer un aparte para comentar algo sobre la agresión química que regalamos a nuestro cabello desde por la mañana. Los productos de higiene y belleza capilar que ofrece el mercado habitual tienen una acción irritante y tóxica sobre nuestro cuero cabelludo (en él se encuentra "la raíz" del cabello, que se denomina folículo piloso).

Pues bien, si implementamos en nuestra higiene diaria productos de origen natural y biológico, no sólo eliminamos la agresión química, sino que aportamos una gran cantidad de nutrientes (antioxidantes, vitaminas...) a la misma vez que se obtiene el objetivo de limpieza del cabello.


Encontramos en el mercado de la herbodietética numerosos champús que garantizan este objetivo. Mediante la presencia en su composición de principios activos como la miel de acacia (nutricional), la manteca de karité (reparadora), el aloe vera (suavizante), el árbol del té (purificante), la proteína de trigo (protector), la manzanilla (iluminador), el té verde (antioxidante)... nos ofrecen una gran variedad de productos adecuados para cada tipo de cabello, que nos permite aliviar la carga de factores favorecedores hacia la caída del cabello.


Pero no sólo eso, además podemos reforzar nuestra masa capilar con sustancias naturales realmente revitalizantes y energizantes para nuestros folículos pilosos como puede ser el arándano, que con sus propiedades antisépticas refuerza el cabello (ya que un cabello debilitado es más fácil que sea invadido por cualquier tipo de microorganismo); la lavanda, que con su capacidad de regeneración celular estimula las células del folículo piloso; y el grosello negro, antiinflamatorio que minimiza los impactos proinflamatorios que cada día sufre el pelo.

Como conclusión podríamos decir que una dieta adecuada, bien suplementada, en un contexto de acciones de vida hacia minimizar el estrés, con una serie de productos capilares no químicos, biológicos (champús, suavizantes, productos revitalizantes...) compensarán la tendencia genética y la estacionalidad que favorecen la caída del cabello.

Información cedida por la revista "Vida Natural", autor del artículo:Jesús Chicón

La información contenida en este artículo tiene una función meramente informativa. En todos los casos es preferible consultar con su terapeuta, médico, u otro profesional de la salud.

jueves, 15 de octubre de 2015

¿Sabías que...? Curcumina y Maqui

La curcumina reduce el dolor de las agujetas


Que la curcumina es una de las sustancias de moda a nivel terapéutico es algo cada vez más evidente. Ingrediente activo principal de la cúrcuma, en los últimos tiempos se han realizado estudios que demuestran su efectividad en muy distintos frentes que van desde la reducción del riesgo de enfermedad cardíaca, al aumento de la capacidad antioxidante del organismo, pasando por sus propiedades anticancerígenas y antienvejecimiento. 

Ahora, investigadores de la Universidad de Canterbury, Nueva Zelanda, han descubierto que puede reducir el dolor producido por las tan temidas y molestas agujetas, y favorecer la recuperación muscular en personas físicamente activas.

Con el fin de determinar si la curcumina producía algún efecto sobre el ejercicio de salto a una pierna y las agujetas producto de un ejercicio pesado poco habitual, los autores del estudio administraron a 17 voluntarios varones 2,5 gramos de curcumina oral o un placebo, dos veces al día desde dos días antes a tres días después del ejercicio, tras un periodo de dos semanas sin hacer ejercicio.

A lo largo del estudio, los investigadores controlaron el dolor de las extremidades tras el ejercicio, la hinchazón muscular, así como el daño muscular y la inflamación, al inicio, inmediatamente después del ejercicio, un día después del ejercicio y dos días después.

Los resultados fueron positivos. Además de inducir una reducción de moderada a grande en el dolor provocado por el ejercicio de cuclillas sobre una pierna, estiramientos de glúteos y saltos en cuclillas, la suplementación con curcumina también produjo pequeñas reducciones en la actividad de la creatina quinasa, una enzima cuyo aumento en el torrente sanguíneo se relaciona con lesión muscular.
Los investigadores también encontraron que la curcumina mejoraba el rendimiento de los voluntarios en el ejercicio de saltos a una pierna debido a sus propiedades antiinflamatorias.



Maqui, adecuado para los fumadores moderados

Las enfermedades respiratorias como neumonía, asma o enfermedad pulmonar obstructiva crónica se asocian a procesos oxidativos e inflamatorios generados por microorganismos, sustancias contaminantes o tabaco. Estudios epidemiológicos apuntan que un consumo elevado de frutas y verduras ejerce efectos saludables sobre las lesiones y la función pulmonares, lo que parece deberse a la abundancia de vitaminas y polifenoles con acción antioxidante y antiinflamatoria que tienen estos alimentos.

El maqui es una baya originaria de la Patagonia con un alto contenido en polifenoles y una potente acción antioxidante, por lo que un equipo del Dpto. de Nutrición de la Facultad de Farmacia de la Universidad de Chile se propuso recientemente determinar si la ingesta de un extracto de maqui mejoraba las concentraciones de H2O2 e IL-6 en los condensados del aire exhalado (EBC, por sus siglas en inglés) de fumadores sanos.
Estos dos marcadores biológicos son habitualmente utilizados en los estudios que evalúan los cambios inmunes producidos en personas fumadoras. Para ello, administraron dos gramos de un extracto de maqui a 15 fumadores sanos, dos veces al día, durante dos semanas. El contenido de H2O2 e IL-6 del EBC, antes y después del tratamiento, se comparó con el de muestras de EBC realizadas a personas sanas no fumadoras.

Al inicio del estudio, las concentraciones de H2O2 eran más elevadas en los fumadores y las de IL-6 más bajas, respecto a los no fumadores; al final, tras la administración del extracto de maqui, ambos niveles mejoraron en los fumadores, igualándose con los de los no fumadores.

Los investigadores concluyen que el extracto de maqui normaliza las concentraciones de H2O2 e IL-6 en fumadores moderados sanos, lo que sugiere que los polifenoles podrían ser una interesante alternativa en el manejo dietético de los trastornos respiratorios. 


Información cedida por Revista Vanguardia

La información contenida en este artículo tiene una función meramente informativa. En todos los casos es preferible consultar con su terapeuta, médico, u otro profesional de la salud.

jueves, 8 de octubre de 2015

Tiempo de granadas


Es el momento de empezar a consumir esta fruta de temporada que es un excelente alimento, no solo gracias a su aporte nutricional, sino también  gracias a su bajo contenido calórico y poco azúcares.

Posee importantes acciones antioxidantes gracias a su alto contenido natural en minerales, vitaminas y fito-químicos.

Contiene vitaminas A, C, D, E, K, B1 (tiamina), B2 (riboflavina) y niacina. Es una importante fuente de mineral de potasio, fósforo, hierro azufre, silicio, cinc y calcio.


Contiene además ácido cítrico, málico, pelágico, punícico y Omega 5.
Tiene diferentes polifenoles, con una gran cantidad captadora de radicales libres, como la punicalagina.
Su elevado contenido en potasio y bajo en sodio ayuda a mejorar el problema de la hipertensión. Se recomienda en problemas de hipertensión arterial, problemas cardíacos, en problemas de arteriosclerosis por colesterol alto....
En problemas digestivos como la diarrea, disentería o parásitos intestinales. Para estomatitis, problemas de encías....

También se le otorgan posibles efectos sobre la masa ósea (osteoporosis).

Un vaso de zumo de granada tiene más poder antioxidante que el vino rojo, el te verde, los arándanos o las grosellas.

Otros fito-químicos que contiene la granada, estimulan la serotonina y los receptores de los estrógenos, mejorando los síntomas de la depresión.



Las partes como la corteza, las láminas internas blanquecinas, poseen alcaloides, lo que le aporta acciones vermífugas.
Igualmente, el contenido en ácido cítrico y málico ayuda a eliminar el ácido úrico, por lo que también es apropiada para la gota y la litiasis renal por sales de ácido úrico.


La información contenida en este artículo tiene una función meramente informativa. En todos los casos es preferible consultar con su terapeuta, médico, u otro profesional de la salud.

jueves, 1 de octubre de 2015

Depresión, causas y tratamiento

La tristeza y la melancolía son dos sentimientos presentes en algún momento de la vida de todas las personas, al igual que la alegría y el placer. Los dos primeros no son en sí patológicos, pero en algunas ocasiones pueden llegar a serlo para ciertas personas. Cuando el estado de ánimo de un individuo en un determinado momento de su vida sufre sentimientos severos y prolongados de tristeza o síntomas relacionados que afectan a su capacidad para relacionarse con otros, trabajar o afrontar el día, la tristeza se convierte en una enfermedad, que se conoce como depresión.


Causas
Entre las principales causas de la depresión podemos encontrar tanto factores genéticos, fisiológicos y personales como ambientales.

Factores genéticos: la presencia de antecedentes de depresión en el ámbito familiar cercano (padres y hermanos) incrementa en un 25-30% la probabilidad de sufrir depresión.

Factores fisiológicos: existe un grupo de enfermedades estrechamente ligadas a la aparición de depresión, la mayoría de ellas relacionadas con alteraciones endocrinas. Las más importantes son: migrañas, diabetes, hipertiroidismo, síndrome de Cushing, enfermedad de Addison y amenorrea hiperprolactinémica.

Factores ambientales: se consideran factores potenciadores de la aparición de este trastorno todos aquellos que son negativos para el sujeto (estrés, ansiedad, incapacidad de encauzar los problemas) en cualquiera de sus ámbitos personales (laboral o familiar), en especial si el sujeto se encuentra además en una situación de dependencia o consumo habitual de alcohol, tabaco o drogas. Una situación de escasas o nulas relaciones interpersonales potencia especialmente estos factores.

Factores personales: se ha visto que existe un porcentaje significativamente mayor de depresión en mujeres que en hombres. La edad también es un factor influyente, y la franja comprendida entre los 35 y los 45 años es la de mayor incidencia de depresiones.
El embarazo y el posparto son etapas vitales de la mujer con un mayor riesgo de aparición de depresión debido a las alteraciones hormonales sufridas.


Síntomas
Son varios los síntomas que pueden presentarse durante la depresión, sabiendo que, cuantos más síntomas aparezcan y cuanto más graves sean, más compleja será la recuperación.
La  definición oficial de depresión clínica, de acuerdo con la Asociación Americana de Psiquiatría en su Manual Diagnóstico y Estadístico de los trastornos mentales (DSM-IV), está basada en los siguientes criterios principales:
  • Estado de ánimo depresivo la mayor parte del día según lo indica el propio sujeto o la observación realizada por otros. En los niños y adolescentes el estado de ánimo puede ser irritable.
  • Disminución acusada del interés o de la capacidad para el placer en todas o casi todas las actividades.
  • Pérdida importante de peso sin hacer régimen o aumento de peso.
  • Insomnio o hipersomnia.
  • Agitación o enlentecimiento psicomotores.
  • Fatiga o pérdida de energía.
  • Sentimientos de inutilidad o de culpa excesivos o inapropiados.
  • Disminución de la capacidad para pensar o concentrarse, o indecisión.
  • Pensamientos recurrentes de muerte, ideación suicida recurrente sin un plan específico o una tentativa de suicidio o un plan específico para suicidarse.

Tipos de depresión
Existen varios tipos de trastornos depresivos. Los más comunes son el trastorno depresivo grave y el trastorno distímico. 
El trastorno depresivo grave, también llamado depresión grave, se caracteriza por una combinación de síntomas que interfieren con la capacidad para trabajar, dormir, estudiar, comer, y disfrutar de las actividades que antes resultaban placenteras. La depresión grave incapacita a la persona y le impide desenvolverse con normalidad. Un episodio de depresión grave puede ocurrir solo una vez en el curso de la vida de una persona, pero mayormente es recurrente.


El trastorno distímico,también llamado distimia, se caracteriza por sus síntomas de larga duración (dos años o más), aunque menos graves, pueden no incapacitar a una persona pero si impedirle desarrollar una vida normal o sentirse bien. Las personas con distimia también pueden padecer uno o más episodios de depresión grave a lo largo de sus vidas.

Algunas formas de trastorno depresivo muestran características levemente diferentes a las descritas anteriormente o pueden desarrollarse bajo circunstancias únicas. Sin embargo, no todos los científicos están de acuerdo en cómo caracterizar y definir estas formas de depresión. Estas incluyen:
  • Depresión psicótica, que ocurre cuando una enfermedad depresiva grave está acompañada por alguna forma de psicosis, tal como ruptura con la realidad, alucinaciones, y delirios.
  • Depresión posparto, la cual se diagnostica si una mujer que ha dado a luz recientemente sufre un episodio de depresión grave dentro del primer mes después del parto. Se calcula que del 10 al 15 por ciento de las mujeres padecen depresión posparto después de dar a luz.
  • El trastorno afectivo estacional, se caracteriza por la aparición de una enfermedad depresiva durante los meses del invierno, cuando disminuyen las horas de luz solar. La depresión generalmente desaparece durante la primavera y el verano. El trastorno afectivo estacional puede tratarse eficazmente con terapia de luz, pero aproximadamente el 50% de las personas con trastorno afectivo estacional no responden solamente a la terapia de luz. Los medicamentos antidepresivos y la psicoterapia pueden reducir los síntomas del trastorno afectivo estacional, ya sea de forma independiente o combinados con la terapia de luz.
  • El trastorno bipolar, también llamado enfermedad maníaco-depresiva, no es tan común como la depresión grave o la distimia. El trastorno bipolar se caracteriza por cambios cíclicos en el estado de ánimo que van desde estados de ánimo muy elevado (por ejemplo, manía) a estados de ánimo muy bajo (por ejemplo, depresión)

Tratamiento
Abordar el estilo de vida de una persona puede ser el primer paso para intentar combatir la depresión. Las personas con malos hábitos alimenticios y la falta de ejercicio pueden ser propensas a la depresión. Asimismo, la eliminación del consumo de cigarrillos, alcohol, cafeína y cantidades excesivas de azúcares, son medidas que suelen dar buenos resultados clínicos.

El tratamiento contra la depresión puede ser de tipo farmacológico y/o psicoterapia. Dependiendo del problema puede ser necesario uno u otro, o una combinación de los dos.
Los antidepresivos se utilizan para corregir desequilibrios en los niveles de las sustancias químicas del cerebro, especialmente la serotonina, un químico cerebral que transmite mensajes en el área del cerebro que controla las emociones, la temperatura corporal, el apetito, los niveles hormonales, el sueño y la presión sanguínea. Los antidepresivos actúan incrementando los niveles de serotonina en las células del cerebro.
El tratamiento farmacológico puede conllevar la aparición de efectos secundarios como el insomnio, nerviosismo, disfunción sexual, náuseas, mareos o aumento de peso. La terapia cognitiva es tan eficaz como los antidepresivos en la depresión de intensidad moderada, con una tasa de recidiva inferior. Al paciente se le enseñan nuevas habilidades para modificar la forma con la que contempla conscientemente el fracaso, la frustración, la pérdida y la indefensión.

El ambiente que rodea a una persona que sufre depresión es fundamental para lograr su rehabilitación. La comprensión y el cariño de los familiares y allegados son importantes, como lo es la paciencia, puesto que la falta de ganas y motivación de los enfermos puede provocar la desesperación. Sugerir y no ordenar actividades, proponer y no imponer conversaciones son apoyos básicos a la terapia impuesta por los profesionales. Uno de los problemas más importantes que presenta  este grupo es el abandono de las terapias, por lo que es fundamental inducirle a seguir el tratamiento hasta el final.

 La deficiencia de cualquier nutriente puede alterar la función cerebral e inducir la depresión o ansiedad. La nutrición influye de manera muy importante sobre la cognición, los sentimientos y el comportamiento. Como consecuencia, la suplementación nutricional puede inducir un efecto terapéutico.





Nutrientes beneficiosos para la depresión
  • Complejo B: Las vitaminas B son necesarias para el funcionamiento normal del cerebro y el sistema nervioso. La deficiencia de vitaminas B como folato, vitamina B6 y B12 puede causar depresión.
  • Zinc y Selenio: La alteración de los niveles de estos minerales está relacionada con trastornos del estado de ánimo.
  • Ácidos grasos omega-3: El cerebro es el órgano con mayor cantidad de fosfolípidos en el organismo, ya que son necesarios para su funcionamiento normal. Los omega-3 pueden inhibir el desarrollo de la depresión.
  • 5-HTP: Algunos estudios han demostrado que el 5-HTP es un efectivo elevador del ánimo, debido a su efecto potenciador sobre los niveles de serotonina cerebral. Además aumenta el nivel de endorfinas.
  • L-Fenilalanina y L-Tirosina. Se metabolizan a una sustancia de induce efectos estimuladores y antidepresivos en el ser humano. La L-Tirosina alivia el estrés estimulando la producción de adrenalina. Aumenta también el nivel de dopamina, que influye en el estado de ánimo.
  • S-adenosilmetionina (SAMe): Funciona como antidepresivo, ya que es importante para la fabricación de neurotransmisores y hormonas implicadas en el estado de ánimo, como la serotonina, la melatonina, la dopamina y la adrenalina.
  • Hipérico (Hipericum perforatum): Posee un efecto inhibidor sobre la pérdida de serotonina. Mejora síntomas como depresión, ansiedad, apatía, alteraciones de sueño, insomnio, anorexia y baja autoestima.
  • Ginkgo (Ginkgo biloba): Mejora el estado de ánimo, especialmente en pacientes mayores de cincuenta años.
  • Azafrán (Crocus sativus): Varios estudios clínicos han demostrado que mejora el estado de ánimo y reduce la ansiedad.
  • Rodiola (Rhodiola rosea), eleuterococo (Eleuxtherococcus senticosus), ginseng coreano (Panax ginseng): Aumentan el transporte de serotonina, dopamina y norepinefrina en el cerebro, mejorando el ánimo y el rendimiento mental y disminuyen la ansiedad. También son adaptógenos, mejorando la resistencia del organismo frente al estrés.


Información cedida por Nutrinat

La información contenida en este artículo tiene una función meramente informativa. En todos los casos es preferible consultar con su terapeuta, médico, u otro profesional de la salud. 

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